Colombia: Resistencia Embera

Cabildo Mayor Río de Verde Iwagadó, 29 de mayo.- Al gobierno nacional:
Por la unidad del pueblo embera, rechazamos la represión de la legítima
protesta indígena del Chocó. ¿Por qué mientras se proponen medidas
completamente ilegales para el tratamiento de los paramilitares y los
políticos vinculados a los procesos de investigación por apoyo a estos
grupos armados asesinos, se combate, reprime y golpea el reclamo
legítimo de las comunidades indígenas del Chocó por sus derechos?

¿Por qué mientras se anuncian fórmulas para garantizar la excarcelación
de cómplices de asesinatos y masacres, de ladrones del erario público,
se criminaliza y desconoce la exigencia y el aporte indígena en la
construcción de un verdadero estado social de derecho?

Anuncia el mismo gobierno la corrupción y el desfalco de los recursos
en el Chocó, anuncian los medios de comunicación la desnutrición y el
hambre de cientos de niños indígenas en el Choco, denuncian las
organizaciones indígenas del departamento la ausencia total de atención
estatal en sus territorios. Entonces, ¿por qué se viola el derecho a la
movilización? ¿Por qué se atenta contra la vida de las mujeres, niñas y
niños que participan de su derecho a expresar el descontento social?

¡¡El pueblo colombiano está perdiendo el miedo señores!!, ¡¡el Chocó
indígena perdió la paciencia, el país ya no aguanta!! ¡oigan y miren a
su alrededor! Los indígenas en el Chocó, niños, mujeres, ancianos,
hombres, continúan exigiendo inversión pública, control a la corrupción
y políticas públicas acordes con el desarrollo propio; obligación
estatal tras más de 500 años de ignominia y en algo reconocida en la
constitución del 91.

Los estudiantes en Bogotá y las capitales se levantan por la
pervivencia de la educación pública y de las transferencias de los
municipios y departamentos, por la descentralización administrativa
también pactada en la constitución del 91. Los docentes de todo el país
levantan sus banderas sindicales y exigencias por el desmonte de las
leyes retorcidas para la guerra y la suspensión de la inversión social,
teniendo en cuenta también el marco constitucional.

¡¿Entonces cómo es que se acusa la movilización social de ilegal, cómo
es que se insiste en criminalizar la protesta popular y señalar
infiltraciones de distinto orden en la acción legítima de la protesta
que no solo se expresa en las calles sino también en ejercicios
intelectuales con propuestas, programas y alternativas que quieren ser
llevados a mesas de negociación y concertación?

Aquí se negocia con asesinos, corruptos, mentirosos y ladrones mientras
a las comunidades indígenas y sus autoridades se les reprime, golpea y
dispersa hasta desaparecer.

Seguiremos marchando, gritando y exigiendo que se sienten a concertar
el desarrollo de la región con las comunidades, que se cumpla con los
principios constitucionales que refieren a los planes de desarrollo,
que se garantice la participación ciudadana en la proyección de la
inversión pública, que se invierta en salud y educación tal y como lo
necesitamos y queremos.

Y no es de extrañarnos el uso de la fuerza antes que de la razón y el
derecho, el capitalismo salvaje es arrasador y torcido, los
megaproyectos que se ciernen sobre el Choco son muchos y en gran medida
jalonados por el actual gobierno, carreteras, puertos, interconexiones
interoceánicas e intercontinentales todo al servicio del sector
privado; la adhesión reciente de Colombia al Plan Puebla Panamá no es
más que la formalización de las proyecciones nefastas sobre nuestro
Chocó.

Así que esto ya no aguanta y es por eso que nuevamente proponemos
espacios de concertación con las comunidades indígenas, cumplimiento de
la ley y la constitución, no más acciones ilegales de violación de
derechos fundamentales, no más leguleyadas tampoco. ¡No hay mal que
dure ocho años ni cuerpo que lo aguante!

Resistencia indígena, resistencia embera. Seguimos en pie de lucha por
nuestros derechos y nuestros territorios. Tierralta, Mayo de 2007
Cabildos Mayores de rio Verde y rio Sinú•